Si bien los rituales de Año Nuevo son emocionantes y esperanzadores, es importante también cerrar el año que termina. Regálate unos días a finales de diciembre o incluso a inicios de enero para hacer un repaso del año que termina; haz tu balance, recuerda todo lo positivo y lo que no lo fue tanto, reconoce todos tus aprendizajes y poco a poco ve cerrando ese ciclo mentalmente. Puedes hacerlo a tu estilo: escribiendo, meditando, platicando con alguien cercano, en silencio contigo mism@... Esto te ayudará a prepararte para comenzar un nuevo año con la mejor energía y evitará que tus pensamientos estén estancados en el pasado, ¡vive el presente con todo!
3.- Este año atrévete a hacer algo nuevo
¡Sal de tu zona de confort... o amplíala! Este año haz algo nuevo que nunca hayas hecho antes, date la oportunidad de conocer y aprender; de compartir y crecer. Hacer nuevas actividades estimulan nuestro cerebro, nos permiten hacer nuevas conexiones, abrirnos a otras posibilidades e incluso hacer nuevos amigos. ¿Qué te gustaría probar este 2020?